Artículo de opinión. En días pasados, recibí la llamada de un buen amigo, vinculado al Narón Freixo. Una conversación amena, en la cual, uno, alejado de los “dimes
y diretes” futboleros, se interesó por el día a día del club. Además de lo
normal, ahí, en ese momento, fui conocedor de algo que se anhelaba por parte de
muchos, diría que de todos los que queremos el fútbol en Naròn: la desaparición
del Narón Balompé, y la creación de un nuevo club: en este caso, C.D. Narón,
aunque el nombre es lo de menos. No me sorprendió. Era una muerte anunciada.
Repuesto de la, poco sorprendente noticia, le planteé a mi amigo una cuestión, ¿y
ahora, qué? . Mi interlocutor sabía, y sabe, cuál es
la opinión que mantengo al respecto:
Narón se merece que todos en el ámbito del fútbol base trabajen en una misma
dirección. Ahí incluiría al Val (pero esta es otra historia). Dicho de otra forma: habría que abogar por un único club, con todas
las sinergias que eso provocaría, con una asunción de intereses, ideas y
objetivos. Es el momento de tender la mano.

En días pasados, leí una entrevista, casual, con el
secretario de la federación valenciana de fútbol, Salvador Gomar, en la que
éste comentaba: “antes, cuando la economía iba bien, se juntaban cuatro padres y
montaban una escuela. Veían dinero. Se acabó. Hoy en día, el proceso es el de
la fusión de clubes y escuelas. No es normal que en un pueblo pequeño, haya dos
o tres escuelas, porque, además, eso provoca enfrentamientos internos. Por otra
parte, los datos indican que las fusiones no están conllevando reducción de
fichas ni de equipos.” No puedo
estar más de acuerdo.
Quizá, a la hora de plantearse una posible unión, o fusión, o
como queramos llamarla, siempre que el objetivo sea la asunción de un mismo
objetivo, es importante que ambas
partes, Narón Freixo, y el C.D.Narón, dejen
en la mesa de negociación parte de su
egoísmo, que se alejen de la tentación al protagonismo, y piensen en los niños, y en el deporte de
la ciudad. ¿Es bueno para Narón?, ¿es bueno para los niños?. Esa es la pregunta
que todos los interesados deben plantearse, y contestar. Humildemente, pienso
que sí. Pero, además, hay otro motivo mucho más pragmático, y no menos
importante: las sinergias que se provocan. Hay una de inicio, la economía de escala: un
solo club, propiciaría menores costes de
infraestructuras, al no duplicar servicios, mayores ahorros en compra de
material deportivo, en definitiva, eliminaría ineficiencias. Se dice que en el ámbito empresarial, y las
entidades deportivas sin ánimo de lucro no dejan de serlo, las fusiones son
instrumentos magníficos para evitar decadencias y recobrar la salud, deportiva
en este caso. Intentémoslo.
Siguiendo con los beneficios, y tratándose de dos entidades
que trabajan en un mismo ámbito, podrán obtenerse mayores réditos en el aspecto comercial, ingresos por
publicidad, en el aspecto de inscripción, pudiendo alcanzar una mayor cuota de
niños, menores gastos, al, como ya comenté, disminuir costes, evitar duplicidades, tanto administrativas
como de infraestructuras. En definitiva, se utilizaría de forma más eficaz los
recursos disponibles, aumentando la economía del club en el aspecto de gestión a corto plazo, y la competitividad, en el ámbito deportivo, a medio y largo plazo.
Tampoco podemos olvidarnos de los beneficios a obtener con
respecto a fondos públicos, puesto que una sola entidad, representativa de todo
el municipio, podría ser perceptora de
mayores ingresos, vía publicidad pública o institucional, acceso a más y
mejores fuentes de financiación, amén de
otras.
Ahora bien, es cierto que lo esencial es la voluntad de las
dos partes a negociar, algo que ignoro a día de hoy, y, después, dando por hecho
lo anterior, ¿ qué haría un servidor? : sería imperioso un estudio financiero y
administrativo que valore los beneficios reales de la integración. Para ello,
ambas entidades, mediante una comunicación sincera y continua deberán valorar
los beneficios de la unión.
A la hora de plantearse esa posible
“confluencia de intereses” , lo que tenemos que valorar son varias
cuestiones : ¿la unión dará lugar a una
entidad más fuerte económicamente ?, ¿ la unión dará lugar a una entidad más
fuerte en lo social y en lo deportivo?, ….esta iniciativa, ¿ contaría con el
visto bueno de las instituciones municipales?..... Si la respuesta es sí, como
personalmente pienso, entonces el siguiente paso es el de tomar la decisión de reunirse y
plantear condiciones. Reunirse sin egoísmos, sin rencores, olvidando rencillas pasadas, y pensando en el interés general. Las condiciones pueden ser de muy diverso signo, pero la experiencia de
fusiones deportivas anteriores, nos dicen que las mayores discrepancias van a
surgir a la hora de determinar si una de las entidades continúa con su historia
en detrimento dela otra, o las dos, o ninguna de ellas…..a modo de curiosidad,
o información, hay que decir que en un 90 % de las fusiones que se han producido en el ámbito del deporte
en España, el club más antiguo ha continuado
manteniendo su historia. Es decir, se ha mantenido su proyecto. En definitiva, todas, cuestiones que se deberían plantear en un
hipotética negociación.
Dando por hecho la viabilidad de
una posible “confluencia de intereses”,
soy consciente de que episodios pasados llevan a una cierta
desconfianza, sobre todo en aquellos que en su día propiciaron la creación del
Narón Freixo, hartos de tanto desaguisado, pero una vez superada esa
desconfianza, y los próximos meses pueden ayudar, habrá que plantearse cuál es la mejor opción. Personalmente, lo tengo claro: es momento de tender la mano.
“De los clubes y asociaciones deportivas:
El club/asociación resultante de la fusión podrá
denominarse como desee y será inscrito en el Registro de Entidades Deportivas
de su región/país con el nuevo nombre si su denominación es distinta a la de
los clubes/asociaciones fusionados, debiendo estarse en cada caso a lo que
proceda en virtud de la normativa administrativa aplicable. El club/asociación
resultante de la fusión se subrogará en todos los derechos y obligaciones de
los anteriores y, en cuanto a su situación competicional, quedará adscrito a la
categoría del que la tuviere superior y conservará la antigüedad federativa del
primer inscrito en la región/país.”
Fusión, o no fusión. Esa es la cuestión.